Heme aquí!, en estos parajes desolados... ajenos a la intervención humana (aunque suene paradójico), silentes de toda risa o expresión mayestática, vacíos de toda mirada...
Me paseo y conjuro a los manes... y tu dónde estarás, ay, ay, ay, ay.
Como un conjuro majestuoso, dejo aquí esta imagen premonitoria de los tiempos que vendrán, más temprano que tarde despertara el aletargado, campeando las voces tonantes de Fritzgenstein y Ssstambo, de Gigio y de João, de Le Camelleaux, Pirulete y Charlão, y el por siempre ausente esbozará una sonrisa...
Marcos.
P.S.: Witowy sigue castigado por limón...
Otro P.S.: El lunes 9 de octubre, en la Plaza Italia, 11:00 h, apoyando a los peñis, de ahí somos.
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